miércoles, 2 de mayo de 2007

Mucha policía = Poca diversión

Ayer fue la tradicional fiesta del Dos de Mayo de Madrid, conmemorativa de la batalla que libró el pueblo contra el ejército invasor de Napoleón. Y, lamentablemente, la conmemoración fue demasiado realista, porque también hubo batalla campal. Entre ayer y el lunes, se cuentan 85 heridos y 18 detenidos.

La policía está para salvaguardar el orden ciudadano y proporcionar seguridad a los habitantes de la ciudad. Ayer, por desgracia, cumplieron mal su función. No se puede pretender que durante todo el año se consientan los botellones en varios sitios emblemáticos de Madrid, como puede ser éste de Malasaña, y luego se intenten disolver por la fuerza a partir de cierta hora un día conmemorativo y de especial relevancia social para la gente que se congrega allí. Ocurrió algo parecido con el "macrobotellón" del año pasado de la capital (que más bien fue microbotellón), donde los agentes impideron la entrada al parque a cualquier joven que portara botellas con alcohol, incautando incluso estas, cuando el resto de fines de semana se hace la "vista gorda" y se deja beber allí. El rollo "ciudad segura" cuando parece que se arma ruido no cuela.

Los policías ayer se excedieron, empleando utensilios como bombas de humo y armas con pelotas para disuadir a los jóvenes. Desde arriba no se fue consciente de que, ordenando esta operación policial, el riesgo de heridos por caídas, pisotones, embestidas y aplastamientos era muy grande. Sólo cabe calificar esta actuación como desastrosa y desproporcionada.

Dicho esto, cabe hablar de otro punto. Yo mismo estaba presente ayer allí. Sigo creyendo que la Ley Antibotellón es un recorte de libertades inadmisible, y seguiré ejerciendo mi derecho a beber en la calle cuantas veces se me antoje. Lo que no se puede entender es que haya gente que vaya a la fiesta del Dos de Mayo con el único y exclusivo motivo de enfrentarse a la policía. Planear de antemano un ataque contra los agentes me parece deleznable, así como el deterioro del mobiliario urbano que se produjo y que afectó a contenedores, papeleras y cabinas telefónicas. Vi a gente tirar contenedores por pura diversión, o por puro alcoholismo. Sea como fuere, su actitud es igual de reprochable que la de las altas estancias que no respetan a los jóvenes en la celebración de una de sus fiestas más simbólicas.

Edito la entrada para poner un artículo de ElPais.com que puede ser de interés. Para verlo, pinchad aquí.

Pero como nunca hay que perder el humor, os dejo este video que grabamos ayer improvisadamente. Llamamos al 112 y pedimos protección policial para protegernos... de la policía xDD El tono de voz del buen hombre que me atendió era de perplejidad absoluta, y tramitó mi petición hasta que en un momento me pidió que esperara para hacer una consulta y colgó. Aquí os lo dejo.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Mucha policia, poca diversión, un error, represión...
En fin...q parece q para esto les pagamos...y no hay andie q nos proteja de ellos.

Anónimo dijo...

Muy crack la llamada, Nach...
Gran idea.
Y el juego de los aldeanos... Marta y yo seguimos con mono de él (jajaja)

Anónimo dijo...

jajajaja mu buena la llamada, aunque lo mejor de la noche fue la rayada de juego ese, toavia toi rayado xk juraria k creia k era marta el lobo (como pike..)